Apodada como la churrería viral de Barcelona, “AlPuente” se traslada a la calle de Padilla, al lado del Teatro Nacional y del Auditori por orden del Ayuntamiento. Aunque en realidad seguirá cerca de su ubicación tradicional en Mercat dels Encants.
Si bien la churrería existe desde 1956, cuando comenzó a aparecer en TikTok y debido a su éxito en esta red social, se viralizó y se dispararon sus ventas.
Su propietario Juan Alpuente, ha sido churrero desde pequeño por legado familiar.
Se animó durante la pandemia a publicar contenido que se multiplicó un sinnúmero de veces, lo cual ocasionó un antes y un después a este sitio.
Una churrería viral con historia
En el último lugar lleva unos ocho años funcionando. Si bien el cambio no ha sido fácil, espera que sea una “oportunidad” para que los clientes puedan disfrutar nuevos productos.
Lo mejor de todo, es que Juan sigue utilizando las redes sociales para informar dónde estará a partir de ahora.
Como la churrería “Alpuente” ya tiene más de 60 años de existencia, ya había tenido antes un cambio de ubicación. Hace 8 años también tuvo que cambiar de sitio de operaciones y fue cuando pasó de donde actualmente se encuentra a la clariana de Glòries al Mercat dels Encants.
El éxito en las ventas
Aumentaron gracias a que Juan tuvo mucho “tiempo libre” durante la pandemia. En estos espacios se dedicó a dar a conocer el negocio a través de la redes sociales, en especial en TikTok.
Y sin saberlo, esta difusión se convirtió en una estrategia clave para el negocio.
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Gracias a esta popularidad las ventas se dispararon entre un 20% y un 30%. Pero algo que destaca su propietario, es que su éxito se debe a la fidelidad de sus clientes, que han acompañado por varias generaciones a la churrería que inició su padre.
Incluso trabajadores del mercado o comensales de les Glòries van hasta “Alpuente” cuando buscan un dulce capricho o por rutina.
Gracias a su incursión en las redes sociales ha podido conocer a mucha gente nueva. Algunos le visitan, graban contenido con Juan y toda su labor ha tomado otro sentido.
Sin embargo, así como subieron las ventas, los precios de los insumos también lo hicieron. Por ejemplo, dice Juan, la garrafa de aceite de 25 litros que costaba 65 euros ahora cuesta 110. Cabe resaltar que para la elaboración de sus productos, solo utiliza aceite de orujo de oliva mezclado con AOVE.
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Pero al final, en Alpuente los precios de venta al público han subido «prácticamente nada». Tal vez unos 10 céntimos más para que las personas sigan yendo al sitio.
Dentro de los productos más tradicionales están los churros y porras. Las bolsas de chips de todo tipo y porras de sabores como crema, kinder y chocolate.
