Barcelona se prepara para un nuevo impulso económico en su gestión turística. Gracias al aumento en la recaudación proveniente de las tasas turísticas, la ciudad espera obtener 20 millones de euros adicionales que se sumarán a los ingresos ya previstos. Este incremento no solo servirá para financiar servicios esenciales, como la limpieza, la seguridad y el transporte, sino también para gestionar mejor las zonas más concurridas y saturadas por los turistas, contribuyendo a una mejor convivencia entre los residentes y los visitantes.
¿En qué se invertirán los 115 millones de euros recaudados?
¿En qué se invertirán los 115 millones de euros recaudados?Con el aumento de la recaudación, Barcelona contará con más de 115 millones de euros gracias al recargo 100 % municipal y al 50 % del impuesto sobre las estancias en establecimientos turísticos (IEET), que gestiona la Generalitat. Estos ingresos se destinarán a una serie de proyectos que buscan no solo mantener la calidad de los servicios urbanos, sino también mejorar la experiencia tanto de los turistas como de los residentes.
Entre los servicios que se verán beneficiados por este incremento en la recaudación están algunos tan esenciales como:
- Limpieza urbana: Con la afluencia de visitantes, la limpieza de la ciudad se vuelve crucial para mantener un entorno agradable tanto para quienes la habitan como para quienes la visitan.
- Seguridad: El aumento de la recaudación permitirá incrementar los recursos en seguridad, lo que es fundamental en zonas turísticas de alta ocupación.
- Alumbrado público: Se busca mejorar la infraestructura urbana para garantizar que los espacios públicos sigan siendo atractivos y seguros.
- Transporte público: Dado el uso intensivo que hacen los visitantes del transporte, se destinarán fondos para mejorar y ampliar los servicios de movilidad.
El Plan de espacios de gran afluencia (EGA): clave para gestionar la saturación turística
Uno de los grandes retos para una ciudad tan visitada como Barcelona es gestionar adecuadamente las zonas con alta afluencia turística. Para ello, una parte significativa de los fondos se destinará al Plan de espacios de gran afluencia (EGA), que tiene como objetivo mejorar la convivencia entre turistas y residentes en áreas particularmente concurridas. Este plan incluirá medidas como:
- Aumento de agentes cívicos: Para controlar el comportamiento de los visitantes y asegurar que se respeten las normas de convivencia.
- Mejora del espacio público: El mantenimiento y la mejora de las áreas comunes es esencial para garantizar que tanto residentes como turistas puedan disfrutar de la ciudad.
- Gestión de flujos turísticos: Para evitar la sobrecarga de ciertas zonas, se implementarán medidas que busquen redirigir a los turistas hacia otras áreas de la ciudad, distribuyendo mejor el impacto del turismo.
- Dinamización del comercio local: Apoyar a los comercios de las zonas con alta afluencia turística es clave para mantener la identidad de los barrios y ofrecer productos de calidad tanto a los turistas como a los residentes.
Fomentando ferias y congresos para diversificar la economía de la ciudad
Una de las metas del gobierno municipal es diversificar la economía de la ciudad, y los fondos obtenidos a través del recargo turístico también se destinarán a este objetivo. En concreto, se buscará fomentar eventos como ferias y congresos que no solo traen valor económico, sino que también impulsan el dinamismo de la ciudad y atraen a un perfil de visitante interesado en la innovación y el intercambio cultural.
Este enfoque no solo permite que la ciudad se diversifique y no dependa únicamente del turismo de ocio, sino que también ayuda a posicionarla como un referente en el ámbito de los eventos profesionales. Barcelona ya es conocida por acoger eventos de talla mundial, y la idea es seguir construyendo sobre ese éxito.
Aprobación del aumento de la tarifa: un consenso amplio en el Plenario municipal
El aumento de la tarifa del recargo turístico fue aprobado provisionalmente en el Plenario municipal a finales de julio, con un amplio respaldo de los grupos municipales. Tras pasar por el periodo de información pública, durante el cual no se presentaron alegaciones, la medida ha quedado automáticamente aprobada.
Este consenso entre los diferentes grupos políticos refleja la importancia de gestionar el turismo de manera sostenible y de asegurar que los beneficios de esta industria repercutan de forma positiva en los ciudadanos. En lugar de verlo solo como una fuente de ingresos, el gobierno local está utilizando el turismo como una herramienta para mejorar la calidad de vida de los barceloneses y asegurar que la ciudad siga siendo un lugar atractivo para vivir y visitar.
Un motor de desarrollo
Barcelona sigue demostrando que el turismo puede ser un motor de desarrollo cuando se gestiona de manera responsable. Con los más de 115 millones de euros recaudados, la ciudad no solo podrá mejorar sus servicios esenciales y gestionar mejor las zonas de alta afluencia, sino también fomentar eventos que impulsen la economía local. Este enfoque más equilibrado y cualitativo en la gestión del turismo no solo beneficiará a quienes visitan la ciudad, sino que también garantizará que los residentes puedan seguir disfrutando de su Barcelona, sin sentir que están perdiendo su identidad o su espacio.
