En un anuncio conjunto, el Govern catalán y el Ayuntamiento de Barcelona han revelado que las obras para la extensión de la Línea 8 del metro iniciarán en enero de 2024.
Sin embargo, este paso no está exento de controversias, ya que se espera que afecte parcialmente al Parque Joan Miró en el Eixample Esquerra.
A pesar de las preocupaciones de las asociaciones de vecinos, que consideran insuficientes las medidas tomadas para reducir el impacto, las autoridades han confirmado que el proyecto avanzará.
La reducción del área destinada a materiales y la afectación de 118 árboles en lugar de los 178 iniciales son los compromisos adoptados para mitigar el impacto en el parque.
Aunque esta reducción es vista como insuficiente por algunas asociaciones de vecinos, el Govern y el Ayuntamiento consideran que es necesario para avanzar en un proyecto que conectará significativamente varios puntos de la ciudad.
Inician en enero las obras para la extensión de la Línea 8 del metro
El despliegue de la infraestructura se espera que dure alrededor de dos años y medio, con la tuneladora excavando un nuevo canal de cuatro kilómetros entre Plaza Espanya y la estación de Gràcia.
La creación de tres nuevas estaciones (Gràcia, Clínic y Francesc Macià) y la adaptación de otras dos (Espanya y Gràcia) forman parte de este ambicioso proyecto.
Los residentes en el Eixample Esquerra han expresado su descontento, considerando que la reducción del área afectada no aborda completamente sus preocupaciones. »
Sigue con el planteamiento antiguo de que se puede afectar un parque y unos árboles, mientras que el tráfico es sagrado y utilizar la Fira también porque afecta a la economía», según Xavier Riu, de la asociación de vecinos del Eixample Esquerra.
Las autoridades han estimado que la ocupación del parque será gradual, alcanzando su punto máximo alrededor de 2025, afectando aproximadamente 5.300 metros cuadrados de zona verde.
A pesar de las preocupaciones, los defensores del proyecto, desde el Departament de Territori, argumentan que esta intervención es fundamental para la movilidad futura de la ciudad.
La dimensión del proyecto
La obra busca unir los dos ramales de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC), transformando la Línea 8 en una parte esencial del sistema de metro de Barcelona.
La conexión de los ramales del Baix Llobregat y del Vallès, a través de cuatro kilómetros en el interior de la ciudad, se espera que genere un aumento significativo en la demanda, proyectándose hasta un 34%.
Además, la creación de una estación en la zona central de Diagonal, en Francesc Macià, es una respuesta directa a una alta demanda de tranvía en esta área.
A pesar del costo de 412 millones de euros y las complicaciones logísticas, la Generalitat sostiene que el proyecto resultará en un ahorro significativo de emisiones de CO2, cifrado en 2.688 toneladas al año.