Lo que comenzó como un paso pionero para regular el impacto del reparto del comercio online se ha convertido en un camino lleno de desafíos para Barcelona. La famosa «Tasa Amazon», oficialmente conocida como el Tributo para el Reparto del Comercio Electrónico (TREC), que fue implementada en marzo para «regular el uso del espacio público», enfrenta actualmente varios recursos y una sentencia de la Audiencia Nacional que podría dejar fuera del gravamen a Amazon, el gigante del comercio electrónico.
Cuando Barcelona aprobó la TREC en febrero, sus líderes municipales estaban orgullosos de ser pioneros en España. La iniciativa se presentó como una medida para compensar a la ciudad por el impacto del creciente e-commerce y el consecuente aumento de furgonetas de reparto en sus calles.
Sin embargo, a medida que la tasa ha estado en vigor durante casi un año, ha acumulado una serie de desafíos que podrían poner en peligro su implementación tal como se planeó.
Tasa Amazon: Tributo para el Reparto del Comercio Electrónico (TREC)
La TREC, que se aplica a las grandes plataformas de paquetería con ingresos brutos superiores a un millón de euros y dedicadas al reparto a domicilio, ha encontrado oposición desde varios frentes.
La patronal de la logística y el transporte, UNO, ha calificado la medida como «discriminatoria», advirtiendo sobre posibles efectos negativos en el comercio. La Universidad Oberta de Catalunya (UOC) también señaló en un informe que la tasa podría afectar a pequeños negocios y repercutir en el consumidor final.
Además, la TREC ha enfrentado recursos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la Autoritat Catalana de Competència (ACCO). La CNMC sostiene que la tasa distorsiona la competencia al gravar solo la entrega de productos comprados por Internet, excluyendo otros canales de compra.
La ACCO, por otro lado, ha presentado un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), considerando que la tasa obstaculiza la competencia y «discrimina injustificadamente entre competidores».
Sobre la sentencia
Quizás lo más sorprendente en la historia de la TREC es que, a pesar de su apodo de «tasa Amazon», la sentencia reciente de la Audiencia Nacional reconoce que Amazon no es un operador postal y por lo tanto, no estaría sujeto al pago del tributo.
Aunque la sentencia no se relaciona directamente con la TREC, podría tener implicaciones significativas, excluyendo al gigante del comercio electrónico del alcance de la tasa.
La Audiencia Nacional determinó que Amazon se dedica a «actividades de naturaleza logística», como almacenaje, gestión y empaquetado, y que los servicios de transporte son contratados con terceros transportistas.
Esta decisión ha generado discusiones sobre la distinción entre logística y operador postal, planteando preguntas sobre la aplicabilidad de la TREC a empresas con modelos de negocio similares.