La Escola Superior de Música de Catalunya (Esmuc) y Rosalía, la cantante internacional que cursó parte de su formación en esta institución, han establecido una colaboración para fomentar el talento emergente en el ámbito musical. Esta alianza se materializa en la Beca ROSALÍA, un apoyo económico destinado a un estudiante que logre superar las exigentes pruebas de acceso y obtenga la única plaza disponible en el Grado de Cante Flamenco para el curso 2024-2025 en la Esmuc.
Rosalía Vila Tobella, conocida simplemente como Rosalía, es una cantante, compositora y productora española que ha logrado una notable proyección internacional. Nació el 25 de septiembre de 1992 en Sant Esteve Sesrovires, Barcelona. Desde temprana edad mostró un profundo interés por la música, especialmente por el flamenco, un género que ha sido fundamental en su carrera artística.
Beca Rosalía
La Esmuc, única institución pública en Cataluña que ofrece estudios superiores de música, ha anunciado con orgullo esta colaboración con Rosalía, quien pasó por sus aulas antes de convertirse en una figura mundialmente reconocida. La beca, valorada en 15.000 euros, cubrirá la matrícula en la escuela y los gastos de manutención del estudiante seleccionado, permitiéndole concentrarse completamente en su formación. Además, existe la intención de mantener este apoyo durante los cuatro años que dura la carrera, lo que refleja un compromiso profundo con la educación y el desarrollo artístico.
Rosalía, oriunda de Sant Esteve Sesrovires, siempre ha resaltado la importancia de la formación en su carrera. Su paso por la Esmuc fue fundamental para su evolución artística. En 2014, fue admitida en la escuela como la única estudiante de cante flamenco de ese año, iniciando así un recorrido que la llevaría a revolucionar el mundo de la música. Bajo la tutela de José Miguel Vizcaya, conocido como ‘El Chiqui’, Rosalía se adentró en el cante jondo, un estilo que inicialmente no dominaba, pero que con esfuerzo y dedicación, logró dominar y hacer suyo. «Vino a cero de flamenco. No tenía formación de ningún tipo. Ella lo que cantaba muy bien era blues y jazz y, de hecho, le dije que podría ganarse la vida cantando eso», recordó su profesor en una entrevista.
Creación
Durante su estancia en la Esmuc, Rosalía lanzó su primer álbum de estudio, «Los Ángeles». Sin embargo, fue con su segundo álbum, «El mal querer», que marcó un antes y un después en su carrera y en la música flamenca. Este disco le sirvió también como proyecto final de grado. Se trata de una obra conceptual basada en la novela anónima del siglo XIII, «Flamenca».
Su enfoque experimental y su fusión de estilos llevaron a «El mal querer» a ser reconocido internacionalmente. Sumado a ello, el álbum cuenta con inclusión en la lista de los 500 mejores álbumes de todos los tiempos de Rolling Stone y el premio Grammy a Mejor Álbum Alternativo o Rock Latino. «Rosalía tiene un enorme talento, pero ha trabajado, se ha preocupado de tener unos conocimientos. El talento y el estudio siempre suman», afirmó Núria Sempere, directora general de la Esmuc.
Formación de calidad
La Esmuc, con esta beca, subraya su compromiso con la formación de calidad y con la creación de oportunidades para aquellos estudiantes que, sin importar sus recursos económicos, tienen el potencial de convertirse en las próximas grandes figuras del flamenco. El entorno multidisciplinar de la escuela, que permite la interacción entre diferentes géneros musicales, busca que los estudiantes desarrollen un estilo propio y único. En el caso del flamenco, esta riqueza en la formación es clave para nutrir un arte que, aunque profundamente enraizado en la tradición, sigue evolucionando y fusionándose con otras corrientes musicales.
La colaboración entre Rosalía y la Esmuc no solo fortalece los lazos entre la artista y su alma mater, sino que también representa un faro de esperanza para jóvenes talentos que, como Rosalía en su momento, sueñan con transformar su pasión por la música en una carrera profesional de éxito. Este tipo de iniciativas, que combinan el respaldo económico con el prestigio de una formación reconocida, son esenciales para garantizar que el arte siga floreciendo en todas sus formas.
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