Ha abierto de nuevo sus puertas la Casa Amatller
Tras varios años de restauración, unos años que se han tornado eternos para los amantes del arte y la arquitectura, por fin ha abierto de nuevo sus puertas la Casa Amatller.
Para los que no sois de la ciudad o no conocéis la Casa Amatller, una forma breve de definirla es como una de las joyas del Modernismo catalán y una de las piezas de la famosa Manzana de la Discordia.
A pesar de que la espera para poder disfrutar de esta obra se ha hecho larga, debemos sentirnos felices, ya que este complejo proceso de restauración ha permitido que recobre su esencia, esa que había impreso en ella Josep Puig i Cadafalch.
La parte positiva es que ahora, tras este proceso de restauración que nos ha devuelto una de las grandes obras que hacen a esta ciudad tan especial, ya que antes de la restauración sólo se utilizaba como centro de investigación.
Quizá el único «pero» es que se ponen ciertas limitaciones en cuanto a las visitas, ya que, desde su apertura, el pasado día 13 de este mismo mes, sólo se puede acceder en grupos reducidos de 12 personas. Y las entradas tienen un precio de 15 € por persona.
Sobre la Casa Amatller
La Casa Amatller está situada en el número 41 de Passig de Gràcia, justo al lado de la mágica Casa Batlló de Gaudí y es otro de los edificios de la Manzana de la Discordia.
Es un obra que creó Josep Puig i Cadafalch entre el 1898 y el 1900 encargada por el chocolatero Antoni Amatller y que mezcla el estilo gótico catalán y el flamenco.
Se trata de un palacio gótico urbano en el que destaca su precioso patio central, la escalera qu permite el acceso a las habitaciones de la vivienda y su plana fachada.
Además de ser una auténtica belleza, su fachada destaca por contar con un Sant Jordi al que dio forma el escultor Eusebio Arnau.
El imponente vestíbulo, en el que podemos perdernos maravillados con sus preciosas lámparas y sus dos escaleras, se diseñó y creó pensando en la entrada de carruajes, algo muy habitual en esta época.