En un hito histórico, el Govern de la Generalitat ha llevado a cabo la mayor inversión para alcanzar la soberanía en conectividad. Más del 92% de la población catalana ahora disfruta de una red de fibra óptica pública, en un esfuerzo por reducir el gasto público en internet.
Este despliegue, que abarca 5.213 km y alcanza 473 municipios, es un paso firme hacia la conectividad universal.
La expansión de esta red, la más grande en la historia de Catalunya, no solo beneficia a áreas urbanas sino que también impacta positivamente en municipios pequeños y áreas con población dispersa.
En palabras de la Secretaria de Telecomunicacions i Transformació Digital, este proyecto busca garantizar «el acceso universal a la conexión, entendido como un derecho a preservar para toda la ciudadanía, viva donde viva».
Este ambicioso plan no solo impulsa la igualdad de oportunidades sino que también aborda la brecha digital y promueve la igualdad de acceso digital y servicios asociados, equilibrando las oportunidades entre territorios.
La estrategia de despliegue de la fibra óptica pública
La estrategia del Govern implica desplegar la fibra en todo Catalunya y ponerla a disposición de las operadoras locales. Este enfoque descentralizado dinamiza el mercado al permitir que los operadores amplíen sus servicios, generando nuevas oportunidades para las actividades económicas, sociales y culturales.
Este modelo no solo se trata de conectar a la población sino de descentralizar el mercado de operadores y fomentar el crecimiento de operadores locales. La conectividad se convierte así en un catalizador para la digitalización de diversas actividades, creando un ecosistema digital inclusivo.
Colaboración público-privada
La extensión de la fibra óptica pública es parte de un nuevo modelo de conectividad catalana basado en la colaboración entre diferentes niveles de gobierno y la colaboración público-privada.
Esta iniciativa se alinea con el Pacto Nacional por la Sociedad Digital, fomentando el diálogo entre administraciones y actores involucrados.
La Comisión Europea también respalda esta estrategia, abogando por incentivar inversiones en redes de alta capacidad y garantizar la igualdad de condiciones para todos los actores en el mercado digital.
Catalunya nos conecta
Bajo la campaña ‘Catalunya ens connecta’, este despliegue de fibra óptica pública se orienta hacia la construcción de una Catalunya conectada.
Más allá de la conectividad básica, se busca habilitar tecnologías disruptivas como la computación descentralizada, el uso de inteligencia artificial y redes de sensores para mejorar la vida de las personas con una perspectiva social inclusiva.
Este es un hito monumental para Catalunya, donde la digitalización no solo es una cuestión de tecnología, sino una palanca para construir una sociedad justa, sostenible y centrada en las necesidades de las personas.
La fibra óptica no solo conecta territorios, sino que conecta vidas hacia un futuro digital inclusivo y al alcance de todos.