A partir de hoy 10 de enero de 2023, Transports Metropolitans de Barcelona, TMB, realizará control de drogas y alcohol y de psicofármacos a los conductores de autobús de la ciudad.
Aunque los sindicatos han rechazado la medida, la modificación de la Ley de tráfico prevista para 2024 contempla la aplicación de este tipo de análisis a quienes desempeñan este rol en el transporte público.
Si bien durante una primera fase los controles serán de carácter voluntario, después del 6 de febrero pasarán a ser aleatorios.
Por su parte, el sindicato CGT acusó a la empresa de poner a los conductores justo «en el punto de mira».
Control de drogas y alcohol a conductores de TMB
El director de la red de bus barcelonesa, Jacobo Kalitovics, explicó que los controles que inician desde hoy se enmarcan en el cumplimiento de un protocolo específico.
Este protocolo busca alcanzar la tasa cero de alcohol y cero uso de drogas entre los trabajadores de TMB a partir del planteamiento realizado meses atrás por la comisión ética de la compañía.
Kalitovics indicó que «los tests hacen parte de las medidas de un mismo protocolo. Existen otras vinculadas a la formación y a la colaboración con la Guàrdia Urbana».
En la primera fase los controles serán voluntarios y no sólo para los conductores de bus para no estigmatizarlos. También se harán para los que trabajan con maquinaria.
¿Cómo se harán los controles?
Los adelantará una empresa especializada, según los estándares de calidad y privacidad exigidos por la Ley.
De esa forma, TMB se adelanta a la modificación de la Ley de tráfico que entrará en vigor hasta enero de 2024.
El cambio de la normativa permite incluir un apartado relacionado con las compañías de transporte y la posibilidad de hacer controles de alcohol y estupefacientes a sus plantillas de empleados.
Jacobo Kalitovics indicó que lo mejor era adelantarse en la aplicación de esta medida para evitar algún suceso grave.
También manifestó que acepta las quejas expresadas por una parte de la plantilla. Sin embargo, hizo énfasis en que la compañía lo que busca es adelantar un ejercicio de responsabilidad con el público usuario: la ciudadanía.
No es imponer, es prevenir.
Así mismo, Álvaro Martín, portavoz del sindicato CGT en TMB Autobuses, aseguró que la aplicación de esta medida se constituye en un “ataque frontal” a los conductores. Expresa que es partidario de que se apliquen los controles una vez la ley esté vigente.
También indicó que el sindicato entregó al Comité de Seguridad y Salud un documento con el cual solicitan ciertos datos sobre la empresa que aplicará las pruebas.
En él solicitan los plazos en que se aplicarán las pruebas y otros aspectos.
El portavoz indicó que hasta el momento no han recibido respuesta.