Gracias a la iniciativa de la asociación SOM Sant Antoni, un cuarto de siglo más tarde vuelve la Fira de Reis de Sant Antoni a Barcelona.
La histórica y popular feria llenó de vida durante 65 años las Navidades en el barrio de Sant Antoni, pero desde 1996 tuvo que cerrar por causa de las obras que se adelantaban en la vía.
Ahora vuelve a alegrar estas fechas abriendo sus puertas al público del 2 al 5 de enero próximos y la última noche el evento se alargará hasta la madrugada.
La iniciativa ha contado con una buena acogida entre los comerciantes y vecinos del barrio.
La Fira de Reis de Sant Antoni se moderniza
La tradicional feria antiguamente se hacía exponiendo artículos en el suelo. Pero ahora se ha modernizado y contará con stands de exhibición bien equipados.
En la feria podrás encontrar variedad de artesanías, juguetes y comercio local del propio barrio como de comercios invitados de la ciudad y de las cercanías.
El objetivo es ofrecer buenos artículos para que los asistentes puedan hacer compras de calidad en un punto de buena proximidad.
El evento contará con establecimientos que ofrecerán refrigerios navideños y otras representaciones de la cultura popular de Sant Antoni.
Durante la semana de la feria también se llevarán a cabo actividades infantiles como pintacaras, talleres, chocolatadas y un paje real para poder entregar las cartas a Sus Majestades.
Una Feria sostenible
Otra novedad importante del evento es que esta edición de regreso le apostará a la sostenibilidad.
De hecho, la feria contará con su propia moneda gracias a la colaboración de la plataforma Plàstic Preciós y a SOM Sant Antoni.
Crearán alrededor de 400 tokens propios por el valor de 3 euros a partir de la recogida de tapones de plástico. Los tokens se podrán utilizar en las 30 a 50 paradas de la feria.
Con ello y a lo largo del mes de diciembre, Plàstic Preciós recogerá los tapones de plástico y adelantará una campaña de concienciación con los asistentes.
También tendrán un stand propio en la feria donde llevarán a cabo talleres para las familias.
Otro de los objetivos de esta edición es recuperar la memoria de la antigua feria que era muy querida y aceptada por el ambiente familiar y de barrio que la caracterizaba.
A propósito, SOM Sant Antoni lanzó una campaña para recuperar la memoria fotográfica de la feria.
Si bien aún no se han recuperado las fotos de las paradas, los organizadores han recibido unas fotos de los caballitos de Baby Cerditas, atracción que por más de medio siglo fue la diversión de los más pequeños de la época.
A esta nueva iniciativa se ha vinculado el comercio local ya que es un buen estímulo para los comerciantes del barrio y para todo el vecindario.