Después del Covid-19, Barcelona muestra un panorama contrastante en cuanto a su distribución socioeconómica, con algunos barrios emergiendo como los más ricos y otros luchando contra la pobreza.
Según el último Índice Socioeconómico Territorial (IST) del Instituto de Estadística de Catalunya (Idescat) con datos de 2020, la brecha entre los barrios más acomodados y los más depauperados es significativa.
Los más ricos
En el top 5 de los barrios más ricos se encuentra el distrito de Sarrià – Sant Gervasi, dominando la lista de territorios acomodados. Tres Torres lidera la clasificación con un índice del 135.9% respecto a la media catalana, seguido por Sant Gervasi-Galvany (131.3%), Pedralbes (129.6%), Sant Gervasi-Bonanova (129.5%) y Sarrià (129.4%).
Estas áreas destacan por su alta población ocupada y su baja presencia de trabajadores de baja cualificación, así como por tener una significativa proporción de población con estudios superiores y una renta media por persona que dobla la media de Cataluña.
Los más pobres
Por otro lado, los cinco barrios más pobres de Barcelona se encuentran en diferentes distritos y están ubicados cerca de las fronteras de la ciudad.
Ciutat Meridiana encabeza la lista con un índice del 66.1% respecto a la media catalana, seguido por El Besòs i el Maresme (72.4%), Trinitat Vella (73.0%), La Marina del Prat Vermell (73.7%) y Vallbona (74.7%).
Estas áreas enfrentan desafíos en términos de baja ocupación laboral, mayor presencia de trabajadores con baja cualificación y una población joven con menor acceso a estudios postobligatorios. Además, la renta media por persona en estos barrios es significativamente inferior a la media catalana.
Después del Covid-19 las diferencias son más notorias
El análisis del Idescat también muestra un retrato de las diferencias socioeconómicas entre los barrios más ricos y los más pobres.
Por ejemplo, en Tres Torres una gran mayoría de la población está ocupada, con una mínima proporción de trabajadores de baja cualificación y una alta presencia de personas con estudios superiores.
Por otro lado, en Ciutat Meridiana, la ocupación laboral es menor, con un mayor porcentaje de trabajadores de baja cualificación y una significativa población joven sin estudios postobligatorios.
Estas disparidades socioeconómicas reflejan la realidad de la ciudad y resaltan la importancia de abordar las desigualdades para lograr una sociedad más inclusiva.
El análisis del Índice Socioeconómico Territorial, IST, no solo proporciona una instantánea de la situación en Barcelona, sino que también arroja luz sobre la distribución de la riqueza y el bienestar en toda Cataluña, ofreciendo información clave para la toma de decisiones en materia de políticas públicas y desarrollo comunitario.
Los municipios
En cuanto a los municipios de más de 500 habitantes, Matadepera, Sant Cugat del Vallès y Castellolí (Barcelona) tienen el índice socioeconómico más alto de Catalunya.
Con el índice socioeconómico más bajo se encuentran en el otro extremo, Barbens y Seròs (Lleida) y Salt (Girona).