Construido originalmente para conectar Barcelona con la Vila de Gràcia, el Passeig de Gràcia ha experimentado una metamorfosis a lo largo de los años, transformándose de un espacio temporal de ocio y cafeterías desmontables en caso de guerra a una zona residencial para la burguesía catalana.
Ahora, después de dos siglos, se ha convertido en la calle comercial más icónica, rica y singular de Cataluña y según algunos, de toda España.
Esta majestuosa avenida no solo se destaca por tener las rentas de alquiler más altas para los comercios, sino que también desempeña un papel crucial en el sector de ventas ‘tax free’.
Datos de la Associació del Passeig de Gràcia revelan que esta arteria comercial representa el 60% de las compras ‘tax free’ en la provincia de Barcelona, y concentra el 40% de esta actividad a nivel nacional, contribuyendo significativamente al 27% de las ventas ‘tax free’ en España.
El sistema ‘tax free’ permite a los turistas de fuera de la Unión Europea comprar en ciertas tiendas sin pagar impuestos asociados a sus productos.
El Passeig de Gràcia se ha convertido en un imán para estos compradores internacionales, respetando las directrices de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sobre la tributación en el país de consumo.
El Passeig de Gràcia, una avenida de lujo
Según Lluís Sans, presidente de la Associació del Passeig de Gràcia, esta avenida representa el 60% de las compras ‘tax free’ en la provincia de Barcelona, y Barcelona, a su vez, representa el 40% de esta actividad en toda España. Estos datos destacan la importancia única del Passeig de Gràcia en el panorama comercial español.
No obstante, lo que hace al Passeig de Gràcia verdaderamente único es su diversidad. Con aproximadamente el 40% de su oferta comercial compuesta por marcas de lujo, la avenida se describe como «muy mestiza».
Esta mezcla no solo incluye marcas de alta gama, sino también enseñas del universo Inditex y una combinación de restaurantes, desde estrellas Michelin hasta locales de tapeo.
Según datos de Cushman & Wakefield, alrededor de 134,000 metros cuadrados del Passeig de Gràcia están ocupados por superficie comercial. La demanda sigue en aumento, y la disponibilidad de locales para alquilar ha descendido significativamente desde el tercer trimestre de 2021, registrando ahora un mínimo del 4.5%.
Punto de referente para compras “tax free”
El comercio de lujo ha sido un elemento clave en la transformación de esta avenida, llevándola de ser un distrito financiero a convertirse en un punto de referencia para las compras ‘tax free’ y la experiencia de compras de alta gama. Marcas como Louis Vuitton, Hermes y Cartier han contribuido al cambio significativo, convirtiendo al Passeig de Gràcia en un componente fundamental para la generación de PIB en Barcelona.