En pleno corazón del Born, donde las calles rebosan historia y calor, se esconde una joya gastronómica que está revolucionando la escena pizzera de Barcelona: Fel·la, la pequeña pizzería que ha traído a la ciudad condal la auténtica pizza ‘in teglia’ romana.
Un concepto que nació en Roma y llegó al Born
La pizza ‘in teglia’ no es cualquier pizza. Este estilo romano, caracterizado por una masa alta, crujiente y alveolada, es perfecto para aquellos que buscan una experiencia más ligera y sofisticada que la clásica pizza napolitana. Se cocina en bandejas metálicas, lo que garantiza una textura crujiente por fuera y suave por dentro, ideal para soportar cualquier combinación de ingredientes.
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En Fel·la, este concepto se lleva al extremo, con una creatividad desbordante que te hará replantearte todo lo que sabías sobre pizzas. Marco, el alma detrás del proyecto, encontró en esta técnica una forma de unir tradición e innovación, y vaya si lo ha conseguido.
El arte de la masa en Fel·la
El secreto de Fel·la está en la masa. Ligera pero consistente, es capaz de sostener desde guisos hasta combinaciones más atrevidas. Marco, que además de pizzero fue cocinero, ha logrado crear una base que funciona como un lienzo perfecto para sus más de 300 combinaciones de pizzas que ha creado en solo un año.
Entre las opciones más destacadas está la Margherita Lenta, con una salsa de tomate cocida durante cuatro horas, y el calzone romano, relleno de ricotta, mozzarella y una variedad de embutidos que llevan tu paladar de viaje por Italia en cada bocado.
Productos locales con alma italiana
Si algo distingue a Fel·la es su apuesta por los productos de proximidad. Los embutidos, quesos y verduras provienen de proveedores locales, pero con una clara influencia de los sabores italianos. La conexión entre tradición y sostenibilidad se refleja en cada porción.
El nombre de la pizzería, Fel·la, también tiene su historia: con “h” significa campesino en árabe, mientras que sin “h” se traduce como pedazo o trozo en italiano. Una metáfora perfecta para las porciones rectangulares que descansan en su mostrador y que son, sin duda, algunos de los mejores bocados de pizza que puedes encontrar en Barcelona.
Una experiencia que conquista a primera vista
Cuando entras a Fel·la (ubicada en Sant Pere Més Baix, 69), lo primero que llama la atención es el mostrador. Un desfile de bandejas rectangulares cargadas con más de diez variedades de pizza te invita a probarlas todas. Desde la clásica margarita hasta la atrevida Mortazza, con burrata, nieve de pistacho y lonchas finas de mortadela, cada opción es un espectáculo para la vista y el gusto.
Si eres fanático de los sabores contundentes, los sábados Marco prepara una pizza con ragú boloñés a la catalana, una fusión que mezcla lo mejor de ambas culturas culinarias.
El arte de comer bien en el Born
Fel·la no es solo una pizzería; es un refugio para quienes buscan comer rápido, bien y sin caer en trampas para turistas. Sus porciones ligeras te permiten disfrutar de varias opciones sin sentirte lleno, lo que convierte cada visita en una oportunidad para descubrir nuevos sabores.
En un barrio donde abunda la comida rápida sin alma, Fel·la se alza como un santuario para los amantes de la pizza, ofreciendo un producto auténtico, elaborado con cariño y atención al detalle.
Más que pizza, una experiencia
Fel·la es mucho más que una pizzería; es el reflejo del amor por la tradición italiana y el deseo de ofrecer algo único en Barcelona. Si estás paseando por el Born y buscas un lugar donde disfrutar de una auténtica pizza romana, este es el lugar. No te sorprendas si terminas volviendo al mostrador para pedir una segunda porción; en Fel·la, una nunca es suficiente.