Joan Manuel Serrat canta unos minutos en Harvard al Son de “Penélope”

El legendario cantautor Joan Manuel Serrat vivió un emotivo paso por  los escenarios durante una inusual velada en la prestigiosa Universidad de Harvard. La mítica canción “Penélope” fue la musa que inspiró este inesperado retorno, sumergiendo a Serrat en un breve pero apasionante dúo que encantó al público.

Después de su conmovedora despedida cuando se retiró de los escenarios, Serrat se encontró nuevamente bajo los reflectores del Farkas Hall de Harvard. 

Sentado en una silla, escuchando una recreación de sus canciones a cargo de un cuarteto de jazz, la magia aconteció cuando la icónica melodía de ‘Penélope’ inundó la sala. Dos minutos de pura conexión con su esencia artística, donde Serrat no pudo resistirse y levantándose de su asiento, agarró el micrófono para un conmovedor dúo.

 Joan Manuel Serrat: “cantar es mi vicio”

«Cantar es un vicio maravilloso. Soy afortunado por haber convertido mi vicio en mi oficio», confesó Serrat, revelando la intensidad y la pasión que la música aún despierta en él. El cantautor reflexionó sobre su carrera y la decisión de abandonar la biología para dedicarse por completo a la música. 

Su vida artística y personal fue el foco de una charla de casi dos horas, moderada por los profesores de la Universidad de Harvard, Daniel Aguirre-Oteiza, Tamar Herzog, Mariano Siskind y Alejandra Varela.

La velada culminó con una sorpresa musical preparada por los organizadores del evento. Un cuarteto, integrado por miembros de la banda de jazz, interpretó «Mediterráneo», una de las piezas más emblemáticas de Serrat. 

La energía se apoderó del cantautor, quien al ritmo de la música, dejó que sus pies siguieran la cadencia y sus manos marcaran el compás sobre la silla. Al término de la interpretación, Serrat se levantó y felicitó efusivamente al cuarteto, pero la noche aún tenía más reservado.

Gabriel Ortiz, un talentoso cantante de Texas y miembro del Mariachi Veritas, invitó a Serrat a unirse a otra interpretación. Las notas de “Aquellas pequeñas cosas” resonaron, y el propio Serrat se vio emocionado al saborear su propia creación. 

Sin embargo, fue ‘Penélope’, otro de sus himnos, el que desató la verdadera locura en la sala. Ante las primeras estrofas, Serrat no pudo contenerse. Se levantó, tomó el micrófono y alentó a Ortiz a unirse a él en un dúo que quedará marcado en la memoria de quienes presenciaron este momento único.

Es todo un honor cantar con Serrat

«Qué honor cantar sus canciones y qué privilegio y qué regalo cantar con él», expresó emocionado Ortiz, destacando la magnitud del encuentro musical. Esta espontánea actuación fue el colofón de una noche en la que Serrat, conocido por hacer suyas las letras de Machado y Hernández, cautivó a la audiencia con su cercanía y autenticidad.

Antes de la emotiva interpretación, Carlos Ponce, un asistente al evento y profesor, planteó una pregunta que resonó entre los presentes: «¿Usted tiene el vicio de cantar, pero qué hacemos los que  tenemos el vicio de escucharle?». 

Serrat, con su característico sentido del humor, reconoció la dificultad de dejar los escenarios y reveló su optimismo a punto de cumplir 80 años.