La construcción de viviendas en Barcelona permanece paralizada. Es preocupante este estado, ya que, el primer trimestre del año, solo se visaron 281 viviendas. Esto es equivalente a una reducción de 1.4 % en comparación con el mismo periodo del año pasado. Es un patrón que se debe a la combinación de factores e incluye el incremento en el costo de los materiales y el aumento de los tipos de interés.
Norma exige 30 % de promociones nuevas
Esta norma exige a reservar un 30 % de promociones nuevas y grandes rehabilitaciones para viviendas que son asequibles que han contribuido a este problema. Uno de los pendientes del gobierno municipal de Jaime Collboni es revisar esta norma.
En Barcelona la construcción residencial posee una mayor variabilidad en comparación con ele resto del área metropolitana y Catalunya. Esto se debe a la oferta restringida del suelo que está disponible para la edificación.
Estas promociones iniciaron una vez se aprobó la norma del 30 %. Para el año 2019. Esta cifra de visados de obra residencial se observó una disminución de forma significativa. Y en el 2023, donde los visados de obra nueva cayeron un 48.7 %, lo que representa una baja proporción de viviendas que iniciaron en comparación del 2019.
Factores económicos y financieros
Los factores económicos son los principales obstáculos para la construcción de viviendas nuevas en Barcelona. Después de la pandemia de COVID-19 quedó una gran huella en la economía global que ha sido compleja su recuperación.
El sector inmobiliario se ha visto perjudicado, impactando en gran manera en las condiciones de financiación. En tal sentido, los bancos optan por adaptar políticas restrictivas para conceder hipotecas, lo que impide el acceso a la financiación necesaria para la compra de viviendas y construcción.
Aumento en los costes de construcción
Otro de los factores que ha frenado la producción de viviendas ha sido el incremento de los costes de construcción. Donde los precios de los materiales han registrado un aumento significativo en los últimos años, incrementando de esta manera el costo total de los proyectos. Es una situación que agudiza por la escasez de mano de obra cualificada en este sector, lo que incrementa más los costos.
Políticas públicas y soluciones propuestas
El Ajuntament de Barcelona ha implementado diversas políticas para intentar revertir esta situación. Entre las medidas se incluyen incentivos fiscales para los desarrolladores, la promoción de viviendas de protección oficial. Además, de la colaboración con el sector privado para la construcción de viviendas asequibles. Sin embargo, estos esfuerzos no han sido suficientes para satisfacer la creciente demanda de viviendas.
El estancamiento en la producción de viviendas en Barcelona constituye un gran reto que amerita una solución integral. Mientras tanto, no hay viviendas asequibles, lo que perjudica a todos los residentes de la ciudad. De allí que es necesario revitalizar el sector de la construcción de viviendas, esto asegurará que Barcelona siga siendo una ciudad accesible para todos los habitantes.
