Las imponentes Tres Chimeneas de Sant Adrià de Besòs, conocidas por su majestuosidad y su icónico perfil en el horizonte, pronto abrirán sus puertas al público por primera vez en la historia.
Este emblemático símbolo industrial, que ha sido testigo de la evolución urbana de la región durante décadas, se convertirá en un espacio accesible para todos gracias a la bienal europea Manifesta 15, que se celebrará en Barcelona este año.
Con una altura de 200 metros y visibles desde varios kilómetros de distancia, las Tres Chimeneas siempre han despertado la curiosidad de los habitantes y visitantes de la zona. Ahora, gracias a la iniciativa de Manifesta, los interesados tendrán la oportunidad de explorar su interior y descubrir su historia única.
Aunque inicialmente fueron construidas como parte de una central térmica, hoy en día representan mucho más que eso. Son un símbolo de la transformación urbana y un recordatorio de la importancia de preservar el patrimonio industrial.
Las Tres Chimeneas de Sant Adrià de Besòs
Durante la visita, los participantes podrán explorar los tres pisos de cada chimenea, accediendo a través de escaleras de hormigón.
Las vidrieras originales ofrecen vistas panorámicas al mar, creando un ambiente único que fusiona lo industrial con lo natural. En el interior, se conservan salas de máquinas que parecen sacadas de una película de ciencia ficción, con mandos y equipos de épocas pasadas.
Manifesta 15 tiene como objetivo transformar este espacio en un centro cultural dinámico y diverso, que albergará exposiciones de arte contemporáneo, intervenciones arquitectónicas y actividades educativas.
Se prevé que al menos cinco espacios dentro de las Tres Chimeneas se utilicen para estas actividades, brindando a los visitantes una experiencia única e inmersiva.
También cuenta con un nuevo mapa táctil para personas con discapacidad visual muestra las tres emblemáticas torres, cada una con su propio carácter y función.
Un centro de eventos
La directora de Manifesta, Hedwig Fijen, enfatiza la importancia de elegir lugares fuera del centro de la ciudad para sus eventos, buscando así impulsar la revitalización de áreas en proceso de transformación.
Las Tres Chimeneas son un ejemplo perfecto de esta visión, ya que se encuentran en una ubicación estratégica entre Barcelona, Sant Adrià de Besòs y Badalona.
El futuro de este emblemático sitio sigue siendo motivo de debate. Mientras que algunas propuestas sugieren la creación de un barrio residencial con viviendas sociales, otras apuntan hacia proyectos más ambiciosos, como Catalunya Media City, un hub audiovisual.
Sea cual sea el destino final de las Tres Chimeneas, su legado como símbolo de la historia industrial de la región perdurará en la memoria colectiva de sus habitantes.
La meta es transformar este espacio en un centro cultural dinámico y diverso, celebrando su pasado industrial mientras mira hacia el futuro con esperanza y creatividad.