El alcalde Jaume Collboni está abriendo la puerta a una nueva propuesta que podría cambiar el panorama hotelero de la ciudad. Desde este verano se contempló autorizar la apertura de «mini» hoteles de lujo en el centro de Barcelona, siempre y cuando cumplieran algunos requisitos específicos.
Esta iniciativa surgió en respuesta a la creciente demanda de turismo de alto poder adquisitivo y a la necesidad de mantener un equilibrio en la carga turística de la ciudad.
El alcalde Collboni manifestó su disposición a considerar esta excepción en la política de alojamientos turísticos de Barcelona.
Si bien el plan actual prohíbe la creación de nuevos hoteles en el centro de la ciudad, Collboni está dispuesto a discutir la posibilidad de permitir establecimientos hoteleros de pequeñas dimensiones en el casco antiguo.
Esta propuesta es conocida como «hoteles joya» y su objetivo es atraer a visitantes con un alto poder adquisitivo y ofrecerles una experiencia de lujo en el corazón de Barcelona.
“Mini” hoteles de lujo en el centro de Barcelona: turistas bien atendidos
La propuesta de permitir «mini» hoteles de lujo en el centro de Barcelona es un intento de equilibrar el auge del turismo de alto nivel con la capacidad de la ciudad para gestionar la afluencia de visitantes.
El alcalde ha dejado claro que esta medida no significa una revisión completa del plan de alojamientos turísticos, el cual tiene como objetivo limitar la expansión de hoteles en el centro de la ciudad.
Barcelona ya ha alcanzado su capacidad máxima en términos de carga turística y la administración municipal está comprometida en combatir la proliferación de pisos turísticos ilegales, una lucha que se ha mantenido en años anteriores.
El objetivo general no es aumentar las plazas hoteleras en el centro de la ciudad, sino ofrecer una medida de excepción.
Ampliación de la oferta hotelera
El alcalde ha destacado que aún hay margen para la construcción de 4,000 plazas hoteleras en las zonas 3 y 4 de la ciudad, ubicadas fuera del centro histórico.
Además, se espera que la construcción de la estación intermodal de La Sagrera dé lugar a la posible construcción de un nuevo hotel en sus alrededores, acorde a los proyectos urbanísticos de la zona.
La política de cruceros en Barcelona también ha sido un tema importante del alcalde. De hecho, manifestó la intención de respetar el acuerdo institucional alcanzado en 2018 entre su predecesora, Ada Colau, y el Puerto de Barcelona.
Dicho acuerdo establece la concentración de las terminales de cruceros en el Muelle adosado, una zona más alejada del centro de la ciudad.
Collboni también ha señalado su interés en trabajar para que Barcelona se convierta en una base de cruceros y reducir las escalas de los barcos que actualmente solo permiten visitas de unas pocas horas en la ciudad.