En una situación que ha conmocionado a la ciudad de Barcelona, el Cementerio de Montjuïc ha sido objeto de profanación de 162 nichos durante los últimos meses.
La noticia ha dejado atónitos a los ciudadanos y ha generado una ola de indignación por el irrespetuoso acto de robar pertenencias de valor que yacen junto a los difuntos.
El caso está siendo investigado desde el pasado 3 de julio por las autoridades de Mossos d’Esquadra, quienes recibieron una alerta por parte de Cementiris de Barcelona sobre el inusual estado de las lápidas.
Las mismas presentaban resquebrajamientos y deterioro, pero la cantidad de casos hizo descartar que se tratase de daños causados por el paso del tiempo o trabajos cercanos.
La triste realidad es que estas profanaciones tenían un objetivo claro: buscar joyas, relojes e incluso piezas dentales de oro que pudieran haber sido enterradas junto a los fallecidos en su último viaje.
Los nichos profanados datan principalmente de los años 60 y 70 del siglo pasado y presentan losas de hormigón, muchos de ellos sin lápidas.
Profanados 162 nichos del Cementerio de Montjuïc
Ante este acto despiadado, Cementiris de Barcelona ha reforzado la vigilancia y ha colaborado con los Mossos y la Guardia Urbana para poner en marcha un dispositivo de seguridad.
Incluso, se han utilizado drones en un intento de detectar a los responsables, pero hasta el momento no se ha logrado capturar a los perpetradores de este acto inhumano.
Las consecuencias de estas profanaciones no solo afectan a los objetos de valor que han sido robados, sino también a los familiares de los difuntos, quienes sufren una vez más la pérdida y la aflicción al saber que la paz y el respeto de sus seres queridos en su descanso final han sido vulnerados.
Líderes municipales han solicitado un incremento de la presencia de guardias de seguridad en el cementerio y la instalación de un sistema de cámaras de vigilancia. Es crucial que este espacio sagrado y de recogimiento reciba la protección y el respeto que merece.
Sobre este camposanto
El Cementerio de Montjuïc, también conocido como Cementerio Nuevo o Cementerio del Sudoeste, es un lugar de gran importancia histórica y arquitectónica en Barcelona.
Su extensa superficie de 560,000 m² y las 155,227 sepulturas que alberga cuentan con un valor patrimonial significativo.
La diversidad arquitectónica que presenta, combinando elementos neoclásicos, historicistas y modernistas, refleja su rica historia y el carácter ecléctico de Barcelona.
Dentro de este camposanto reposan personajes ilustres y relevantes de la historia de Cataluña, desde políticos como Lluís Companys y Francesc Cambó, hasta artistas de renombre como Joan Miró y Santiago Rusiñol, así como intelectuales como Ana María Matute.
Frente a esta dolorosa situación, es necesario velar por el respeto y la protección de los cementerios.