Cada día en Barcelona se declara el cerco al ruido. Por ello, el gobierno municipal busca poner freno al ruido nocturno que no deja descansar a los vecinos y adelantó una hora el cierre en terrazas de Ciutat Vella.
Con ello, alrededor de 50 bares y restaurantes de la zona tendrán que cerrar sus puertas a las 23 horas durante toda la semana. La limitación horaria de las terrazas en algunas plazas y calles de Ciutat Vella ya entró en vigor, según la resolución publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona.
La norma afecta una veintena de puntos. Con la medida las terrazas y bares sólo podrán abrir hasta media noche en días laborables y solamente hasta la una de la madrugada los fines de semana.
Cierre en terrazas de Ciutat Vella una hora antes
Los establecimientos directamente afectados están ubicados en las zonas consideradas con tensión acústica en horario nocturno de Ciutat Vella.
En concreto son: Escudellers, n’Arai, Obradors entre Escudellers y Rull, Còdols entre Escudellers y Rosa, Nou de Sant Francesc entre Escudellers y Rull. También Carabassa entre Escudellers y Rosa, plaza George Orwell, pasaje del Rellotge, pasaje Escudellers entre calle Escudellers y Josep Pijoan, Joaquim Costa entre Torres i Amat y del Carme. Se le suman Tigre, Paloma, Sant Vicenç entre Tigre y Ferlandina, Ferlandina entre Joaquim Costa y la plaza dels Àngels, la misma plaza dels Àngels, la de Emili Vendrell, y las calles d’Aglà y Vidre.
Esta medida es una de las que ya se están poniendo en marcha en el distrito como parte del plan de reducción de contaminación acústica en plazas y calles. Por ejemplo, durante el mes pasado los establecimientos de venta alimentaria de menos de 150 metros, cuadrados deben cerrar a las 22 horas.
Por otra parte, se ha ampliado el horario de prohibición de circular con monopatines en la plaza dels Àngels y sus alrededores de las 22 a las 8 horas.
Por su parte, Jordi Rabassa concejal de Ciutat Vella ha impulsado una serie de actuaciones para garantizar el descanso de los vecinos de Ciutat Vella. De hecho, ha indicado que agentes de la Guardia Urbana vigilarán el cumplimiento de la norma de reducción de horarios.
Rabassa defendió estas acciones y las calificó como “acciones imprescindibles» que debían tomarse por temas de salud pública y de descanso de los vecinos.
El objetivo es actuar además de Ciutat Vella, en otros barrios que también padecen del problema del ruido.
Protestas por el cierre en terrazas de Ciutat Vella una hora antes
El Gremio de Restauración de Barcelona anunció que lanzará una campaña de protesta contra la decisión del gobierno municipal. No comparten el adelanto del cierre nocturno en las terrazas de Ciutat Vella y otros puntos de la ciudad.