Esto de quedar para tomar un vermut no es algo nuevo. Pero sí es muy actual.
Hace algún tiempo hablamos ya de la tradición del vermut en el blog…
Y nos encanta ver cómo las nuevas generaciones retomamos tradiciones y las adaptamos a nuestros días convirtiéndolas, al menos en este caso, en algo de lo más cool.
Sí, amig@s, la hora del vermut es una tradición en muchas casas y familias y también un must entre los jóvenes. Se está convirtiendo en el planazo entre amigos.
La tradición de vermut en España, aunque viene de antes, se popularizó tras la Guerra Civil, con mitivo de los «domingo en el bar» que disfrutaban por aquel entonces las personas que pertenecían a una clase media-baja.
Allí, disfrutaban de largas charlas en compañía de una copa.
Y sí, como podéis imaginar, la bebida más común por aquel entonces era un buen vermut al que se le solían añadir una o dos olivas dentro.
Pero alcanza el máximo de popularidad, quizá, gracias al gran James Bond. Los amantes del agente secreto 007 saben bien cuál era su bebida favorita y cómo la le gustaba: bien agitada, pero no revuelta.
Para los despistados o los que no sois muy de cine, esa bebida era un vermut blanco. Los menos puestos en la materia quizá les suena más Martini blanco.
“¿Quedamos para tomar un vermut?”
Como decíamos al principio, la tradición se ha vuelto actualidad. Y en este caso más que nunca, nos encanta. Y es que no se nos ocurre mejor plan para una tarde cualquiera o un fin de semana que un buen vermut en una compañía agradable.
Un lugar excepcional para este fin es, sin duda, el Restaurante Pasa Tapas. Sí, esta es nuestra elección por esta vez.
Y tú, ¿ qué dices? ¿Quedamos para un vermut?