A partir del 31 de enero de 2024,comenzó una nueva fase en Catalunya en la lucha contra la pandemia de COVID-19. La Conselleria de Salud de la Generalitat ha anunciado que la mascarilla dejará de ser obligatoria en centros sanitarios y sociosanitarios a partir de esta fecha.
Esta decisión se toma como respuesta a la mejora significativa de la situación epidemiológica general en la región, marcando un hito en las medidas de prevención que se han implementado durante semanas.
Cambios en las medidas sanitarias y el uso de las mascarillas
Después de varias semanas en las que el uso de mascarillas en centros sanitarios y sociosanitarios fue una obligación, la Conselleria de Salut ha considerado oportuno levantar esta medida, reflejando la confianza en la mejora de la situación epidemiológica.
La medida, que había entrado en vigor el 9 de enero de 2024 debido al empeoramiento de la situación, ha sido una herramienta crucial en la prevención de la propagación del virus en entornos de atención médica.
Sin embargo, a partir de la medianoche del 31 de enero, la mascarilla ya no será de uso obligatorio en estos centros.
No obstante, el departamento de Salut mantiene la recomendación de usar mascarillas homologadas, especialmente para aquellas personas que presentan síntomas compatibles con enfermedades respiratorias, como la gripe y el COVID-19, cuando se encuentren en espacios compartidos o mal ventilados.
Recomendaciones que persisten
A pesar de la relajación de la medida obligatoria, la Conselleria de Salut continúa recomendando el uso de mascarillas en situaciones específicas. Se aconseja mantener su uso en personas que presentan síntomas compatibles con enfermedades respiratorias o en espacios con ventilación deficiente.
Asimismo, se recomienda su uso al entrar en contacto con personas vulnerables, así como al acceder a residencias y centros sanitarios.
La decisión de la Conselleria de Salut refleja una evaluación positiva de la situación epidemiológica en Catalunya y sugiere un paso hacia la normalización de las medidas preventivas.
El levantamiento de la medida en centros sanitarios es un indicador de la mejora de la presión asistencial y la estabilización de la complejidad post pandemia.
Presión asistencial y estabilidad
Según informes de Salut, la presión asistencial se mantiene estable. Entre el 22 y el 38 de enero, se atendieron a 68.898 urgencias hospitalarias, con una media diaria de 9.843. El porcentaje de ingreso se mantuvo en el 11,2%. Estos datos indican una estabilización en la presión asistencial en los servicios de urgencias hospitalarios.
En los centros de urgencias de atención primaria (CUAP), se atendieron 27.431 urgencias, con una media diaria de 3.919 casos. Aunque la cifra es similar a la semana anterior, la actividad se mantiene estable.
Comparativamente, en el mismo periodo del año pasado, se atendieron 28.441 visitas a los CUAP, con una media diaria de 4.063 atenciones, un 3.6% más que este año.