El pan cambiará de sabor para siempre. Y es que la norma de calidad del pan afecta directamente al pan común, masa madre, pan integral, pan tostado, de molde, colines, biscotes, rallado, de picos o de pita.
Todo se debe a que esta ley obliga a las panaderías a reducir en un 20% la cantidad de sal que utilizan en la preparación del pan.
La norma entró ya en vigencia y de seguro si eres un consumidor habitual de este producto, ya habrás notado el cambio. De seguro el pan ya no sabe como antes.
La norma de calidad de pan
Fue aprobada por el Gobierno en abril de 2019, con el Real Decreto 308/2019, BOE de 11 de mayo que entró en vigor el 1 de julio de 2019.
Sin embargo, se pospuso su cumplimiento hasta el pasado viernes 1 de abril de 2022 para que los fabricantes lograran adaptarse a las directrices,
Entre otras cosas, la normativa fija un nuevo límite de sal que rebaja el uso de sodio en un 20%.
Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la norma implicó una actualización normativa que había sido demandada por el sector productor. Todo con el fin de darle al consumidor el máximo de garantías en los productos que consume.
Antes de la aprobación de la ley, el problema del uso excesivo de sal ya había sido tratado por el sector. De hecho, ya había comenzado a reducir el sodio en los productos de panadería para hacerlos más saludables.
Los productos bajos en sal se les consideran saludables.