En una reciente conferencia en la cuarta edición de la feria de Arte Moderno y Contemporáneo «By Invitation» (Círculo Ecuestre de Barcelona), la directora general del Moco Museum de Barcelona, Iris Brouwer, afirmó que el museo tiene la intención de permanecer en la capital catalana al menos 20 años más. Este período de alquiler está establecido en su actual ubicación, el Palau Cervelló, junto al Museo Picasso.
Brouwer también anunció planes ambiciosos para la expansión del Moco Museum en Europa. «Tenemos la intención de abrir tres o cuatro museos en los próximos 20 años», dijo, comenzando por la próxima apertura en Londres en junio de 2024, específicamente en Oxford Street.
El Moco en Barcelona por lo menos 20 años más
El Moco Museum Barcelona, que se abrió durante la pandemia y en el contexto del proyecto fallido del Hermitage en la ciudad, ha experimentado una «grandísima acogida», según Brouwer. A pesar de ser un museo cien por cien privado, ha aportado «un nuevo concepto a la oferta cultural de Barcelona».
La directora del museo presentó a Kim y Lionel Logchies, los dueños del museo, que cuentan con «una trayectoria de 25 años en el mundo del arte». Comenzaron con una galería que tuvieron que sustituir por el museo actual en Ámsterdam en 2016 debido a la alta afluencia.
Barcelona, según Brouwer, es una ciudad especial para ellos, y la elección de abrir un museo aquí fue «bastante lógica».
La búsqueda de un espacio similar al de Ámsterdam en Barcelona fue un desafío. Estuvieron a punto de desistir hasta que el futbolista Patrick Kluivert, amigo de los dueños, les sugirió el Palacio Cervelló, un edificio del siglo XVI junto al Museo Picasso. Este edificio histórico cumplía con el prototipo de antigüedad que buscaban para contrastar con el arte moderno.
El Museo actualmente
Hoy en día, el Moco Museum Barcelona cuenta con dos plantas llenas de obras de artistas destacados como Andy Warhol, Murigami, Kusama, Banksy y el artista local Yago Hortal. También alberga obras de arte inmersivo y digital.
Iris Brouwer destacó la importancia del arte digital para el museo, representando el 10 por ciento de las exposiciones, ya que es «flexible, sin limitaciones y parte de nuestra filosofía de innovación».
Aunque el Moco Museum no recibe financiación pública de Barcelona, mantiene una sólida relación con otros enclaves culturales de la ciudad, como la Casa Batlló o el MACBA. Brouwer afirmó su compromiso de «seguir involucrándose e integrándose en la ciudad».
La noticia de la intención del Moco Museum de permanecer en Barcelona por al menos dos décadas más ha sido recibida con entusiasmo por la comunidad artística y cultural de la ciudad, al igual que sus planes de expansión hacia otras ciudades europeas.